viernes, 6 de agosto de 2010

Explotación laboral en empresas de servicios petroleros

Explotación laboral en empresas de servicios petroleros
Ana Lilia Pérez


En campos petroleros y plataformas marinas las empresas prestadoras de servicios a Petróleos Mexicanos obtienen millonarias ganancias a costa del sometimiento de sus trabajadores a verdaderas condiciones de esclavitud.


A ochenta kilómetros mar adentro, las compañías privadas nacionales y extranjeras ejercen su propia ley en instalaciones petroleras mexicanas: violaciones a los derechos humanos y laborales; jornadas de 20 horas diarias; sueldos miserables; maltrato, agresiones físicas y verbales; inseguridad; escasez de equipos de protección; carencia de servicios médicos, y despidos injustificados.


Pocos saben de las condiciones laborales que enfrentan 5 mil trabajadores reclutados por empresas contratadas por Petróleos Mexicanos (Pemex) para la exploración y producción del crudo que, sin regulación alguna, violan los derechos de los trabajadores.

Hasta el año pasado Cliserio Domínguez era empleado de Perforadora Central, SA de CV, la cual alquila a Pemex cinco plataformas marinas en el complejo Cantarell y la Cuenca de Burgos, las zonas de producción más importantes de la paraestatal.
El 4 de marzo de 2004, Cliserio, asignado a trabajos de perforación en la Plataforma Hakuryu V (propiedad de Perforadora Central y la japonesa Japan Drilling Company), se confundió de las órdenes del jefe de mantenimiento, Tomio Nakao, quien le hablaba en japonés. Como no entendiera sus órdenes, Nakao reaccionó golpeándolo violentamente.

“Nakao dio la instrucción respecto al movimiento de materiales, pero yo no entendí y reaccionó violento, me golpeó en la cabeza”, recuerda Cliserio y cuenta que luego presentó su queja ante Juan Domínguez González, superintendente de la empresa. Al reclamo de Cliserio se sumó el de otros trabajadores por maltratos de los superiores de la JDC. En respuesta, el encargado de Perforadora Central, Juan José González, les advirtió “que no nos metiéramos en problemas con los japoneses porque podrían despedirnos”, dice.

Domínguez Sánchez, junto con Efrén Cámara Ruiz, Hernán Aguilar Méndez y Mauricio Castillo Jiménez, presentaron una denuncia ante los órganos internos de control de Pemex, en la que detallan las irregularidades laborales de la Perforadora Central y su socia, Japan Drilling Company.

Las ilegalidades van desde la firma de renuncias anticipadas y documentos en blanco; renuncia a prestaciones; negación de antigüedad; afiliación obligatoria a sindicatos blancos, además del nulo reparto de utilidades y despidos masivos decembrinos para ahorrarse aguinaldos.

“El servicio médico está negado para nosotros; solamente tenemos derecho a los primeros auxilios; no se incluye el traslado a tierra y éste, se hace en inseguras embarcaciones. Las cantidades cotizadas en el IMSS no concuerdan con los salarios y cuando nos presentamos a solicitar atención médica, estamos dados de baja”.

Cliserio fue despedido por Jorge Torres, jefe de personal de Perforadora Central, el 17 de diciembre pasado. Tres días después otros tres trabajadores que remitieron la denuncia contra la empresa al OIC de Pemex, Efrén Cámara Ruiz, ingeniero electrónico; Hernán Aguilar Méndez, ayudante de mecánico, y Mauricio Castillo Jiménez, perforador, fueron despedidos de la Plataforma Usumacinta.
Así inició el acoso contra el resto de trabajadores de Perforadora Central, propiedad del empresario Patricio Álvarez Morphy Camou.

El caso trascendió a instancias internacionales y fue expuesto en enero pasado en el Foro Social Mundial en Porto Alegre, Brasil, como ejemplo de la explotación de trabajadores mexicanos en la paraestatal más importante del país. Actualmente es documentado por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y la Organización Internacional del Trabajo (OIT). Y es que, a partir del despido de los cuatro trabajadores, el acoso y amenazas para el resto del personal se agudizaron.



fin de la primera parte...

No hay comentarios.: