En esta comunidad mexiquense, 3 mil de los 15 mil habitantes trabajaban para la empresa eléctrica; dicen que les asiste la razón y por eso ninguno acudió a las oficinas de la paraestatal a reclamar su indemnización
TENANGO DEL VALLE, Méx.— De los 15 mil habitantes que hay en la comunidad de San Pedro Zictepec, ubicado en este municipio, 3 mil eran trabajadores sindicalizados de la extinta Luz y Fuerza del Centro (LyFC). Por eso la economía local y de los aproximadamente 48 comercios que hay en esa región se desplomó, pero aun así sus habitantes se mantienen unidos.
Desde que el gobierno federal emitió el decreto de liquidación de LyFC, el 11 de octubre, la solidaridad de sus pobladores ha sacado a flote a la comunidad, por lo que ninguno de sus ex trabajadores electricistas acudió a cobrar el finiquito que les ofrecieron las autoridades, según contaron varios de los habitantes.
“En Zictepec estamos unidos y defenderemos nuestros derechos hasta las últimas consecuencias”, dijo el ex trabajador Guadalupe Huerta.
San Pedro Zictepec es una comunidad enclavada en las montañas del sur del valle de Toluca, a 50 minutos de la capital del estado de México.
La comunidad está integrada por cuatro manzanas, nueve calles y dos subdelegaciones que comprenden cinco colonias y poblados.
El gobierno tiene miedo
En entrevista, don Guadalupe aseguró que al haber vencido el plazo para tramitar la liquidación ofrecida por el gobierno federal, ningún miembro de la comunidad y sus trabajadores tienen preocupación, pues están convencidos de que tienen la razón en no aceptar la desaparición de la empresa eléctrica.
Dijo que los ex empleados de Luz y Fuerza del Centro tienen además una opción laboral y de ingreso en el campo y con ello subsistir y mantener la lucha “hasta sus últimas consecuencias”.
La preocupación la tienen los funcionarios del gobierno federal, dijeron varios extrabajadores entrevistados por EL UNIVERSAL en el campamento que mantienen en su comunidad.
Expresaron su confianza en la lucha de resistencia que mantienen en contra de la decisión de liquidar la empresa, pues dijeron que un porcentaje muy importante de trabajadores electricistas no atendió el llamado de las autoridades federales para tramitar los finiquitos.
“Claro que están muy nerviosos porque saben que no les asiste la razón”, sostuvo Huerta, quien también se desempeña como delegado vecinal en esa comunidad.
“Para ellos —los funcionarios del gobierno federal— la liquidación fue un fracaso pues pensaban que para el 14 de noviembre, el cien por ciento de nuestros compañeros ya estaría liquidados, pero como no fue así, hoy están nerviosos”, dijo Javier García Camacho, quien se desempeñaba como juez de la Comisión Autónoma del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME).
Explicó que la falta de dinero no sólo la están padeciendo y sufriendo los trabajadores electricistas, sino las familias de la comunidad, que de una u otra manera estaban “enganchadas” a la derrama económica que generaba el SME.
Liquidación alteró economía local
Esa falta de recursos económicos la han logrado superar hasta ahora con la unidad de todos los pobladores de San Pedro Zictepec, afirmó el eletricista.
“Estamos saliendo adelante económicamente porque podemos asegurar que toda la comunidad está aportando su granito de arena para que podamos seguir en la lucha”, dijo García Camacho.
Relató que días después de haber iniciado el conflicto platicó con su familia sobre las alternativas laborales y la conveniencia o no de aceptar la liquidación que ofrecía el gobierno federal.
“Me dijeron que si las últimas dos décadas de mi vida las había dedicado a trabajar en la compañía de Luz, no tenía porqué desistir en la lucha y permitir que me quitaran mi trabajo”.
José Isabel Camacho, representante suplente de Obras Civiles del SME, opinó que el decreto del presidente Felipe Calderón que ordenó la desaparición de LyFC, modificó la forma de vida de la comunidad, pues prácticamente toda actividad se desarrollaba entorno a los ingresos de los trabajadores sindicalizados.
Daba sindicato preferencia a parientes
A partir de que el esquema laboral que realizaba el SME, en donde se permitía que familiares de los trabajadores tuvieran preferencia en la contratación, un porcentaje importante de la comunidad de San Pedro Zictepec estaba empleada en la ahora extinta paraestatal.
Hermanos, hijos, sobrinos, tíos, primos y parientes en general, tenían la oportunidad de poder desempeñarse en la empresa, explicó Javier García.
Ese era el caso de su familia, porque formaba parte del sindicato y era la tercera generación de electricistas de la familia García Camacho.
“Nuestros antecesores y familiares trabajaron en Luz y Fuerza, y la política del Sindicato Mexicano de Electricistas es que todos los familiares de un trabajador podían tener la oportunidad”, explicó.
Autoridades municipales les apoyan
Los electricistas dijeron que las autoridades de Tenango del Valle también se han solidarizado con su lucha, pues han aportado su respaldo político, por ejemplo al enviar una carta a la Presidencia de la República para expresar su rechazo el decreto de liquidación.
También les han donado despensas y les facilitan transporte para acudir a las movilizaciones de protesta convocadas por el sindicato.
“Ha habido respuesta de las autoridades municipales, sabemos que hay apoyo de todos lados hacia nuestra problemática”, mencionó José Guadalupe Huerta.
—¿Qué es lo que caracteriza a San Pedro Zictepec y a su población?
“La gran mayoría de los trabajadores de esta comunidad somos muy críticos, nos gusta el diálogo y nos gusta hacer las cosas de manera coordinada.
“Podríamos decir que cuando enfrentamos problemas, todos nos unimos, como sucedió cuando nos querían quitar una minas y algunos manantiales de agua”, dijo el delegado.
Desconfianza hacia la prensa
José Isabel Camacho interrumpe la entrevista: “¿Cuál es el fin de esta entrevista? Siempre nos preguntamos porqué nuestros comentarios no salen como los hacemos a los periodistas”.
Dijo que la lucha siempre la han llevado por la vía pacífica pero si ésta no se puede realizar de esa manera para lograr que se derogue el decreto, entonces analizarán acciones alternativas.
“El pueblo sabe tomar las armas, sabe luchar y cerrar carreteras para exigir derechos. Vamos a dar hasta la propia vida si es necesario, pero ese señor no se saldrá con la suya”, dijo en alusión al presidente Felipe Calderón.
1 comentario:
Soy residente de esta comunidad, yo tengo un negocio aquí mismo (Zictepec), mis ventas se han visto afectadas por la desaparición de LyFC, ya que la venta es sólo con la gente del pueblo.
Pero realmente es duro, pero realmente duro golpe a la economía local, ya que se vio afectada la construcción, el comercio local, el transporte (ya que todos los días se transportaban ya sea a sus distintos puntos de trabajo, ya sea en el Valle de Toluca o al Distrito Federal, viendo el porcentaje que representaban los trabajadores de LyFC), también a otros ramos.
Y si contamos que en meses anteriores se despidieron a personas que trabajaban en empresas del ramo automotriz, que se encuentran en la región; como son las que se encuentran en la ciudad de Toluca y en Santiago Tianguistenco y otra que se encuentra en Tenango del Valle que fabrica partes de autos. Tomando en cuenta los LyFC y estas empresas el desempleo en mi localidad (A MI ESTIMACIÓN) rondará cerca de un 35 a 40%. Esto sin contar que personas que se dedican a la construcción de viviendas de la localidad, ya que muchos de ellos eran contratados por personas que trabajan en la LyFC, y por lo sucedido se tuvo que suspender su construcción.
Esto es sólo un breve panorama de lo que se vive aquí en mi querido SAN PEDRO ZICTEPEC.
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